Hemos resistido a la intención que más de un editor nos formulara para actualizar las obras de Couture. Tal vez ello se haya debido a un prurito de honestidad intelectual, porque no nos sentíamos a la altura de la perfección que el Maestro había alcanzado o, tal vez, porque temíamos a la crítica que pudiera sobrevenir sobre lo que hiciéramos. Hoy aceptamos el desafío, y entre las razones que nos motivaron para emprender la tarea de -aggiornare- su Vocabulario jurídico, una surgió de sus propias palabras, en su -Advertencia al lector-: -Este libro es un vocabulario de derecho, procesal, civil, positivo, uruguayo, vigente-.