Desde el feminismo se hacía imprescindible elaborar un nuevo saber cirminológico destinado a ofrecer un marco ideológico crítico con esa realidad simplista y exasperante, empeñada en una explicación ahistórica de la trasgresión femenina, sin referencia a las características estructurales de la sociedad y la cultura en que las mujeres están insertas. Las páginas de este libro se proponen recorrer las trayectorias marcadas por ese pensamiento crítico para investigar, en nuestra realidad penal y penitenciaria, acerca de posibles procesos selectivos de cirminalización que sitúen a las mujeres en una posición de desventaja y de discriminación que una criminología feminista deba desvelar.