El británico Edward Gibbon es uno de los historiadores que mayor influjo ha ejercido y el primero que puede considerarse auténticamente moderno. Esta obra, publicada en seis volúmenes entre 1776 y 1788, es un trabajo de proporciones colosales. Abarca trece siglos, desde Trajano hasta la caída de Constantinopla en manos de los turcos en 1453. Por sus páginas se suceden los más diversos personajes y acontecimientos: Carlomagno, Atila, Mahoma, Tamerlán, las guerras con los pueblos germánicos, el saqueo de Roma, las cruzadas y la difusión del Islam. Pero la obra también es, como dijo Borges, un monumento a la literatura inglesa y al arte de narrar.
Edward Gibbon, Inglaterra 1737-1794. El llamado "Voltaire Inglés" fue el gran historiador de la civilización romana. Además de su magna Historia e la decadencia y caída del Imperio Romano -a la que dedicó quince años de su vida y que se hizo famosa por la calidad e ironía de su prosa-, escribió un Ensayo sobre el estudio de la literatura. Resultó de gran influencia para autores posteriores como Isaac Asimov, que se inspiró Gibbon para su saga de la Fundación, o Winston Churchill, quien basó su propio estilo literario en el de Gibbon.