Los principales filósofos racionalistas del siglo XVII --Descartes, Spinoza, Leibniz-- no sólo quisieron mostrar cómo debería ser la estructura metafísica de la realidad, si ésta ha de ser transparente a la razón. También se animaron a entrar en el laberinto de las pasiones en el que suele perderse el alma humana. Esta serie de ensayos permite comprender cuál fue la máxima pretensión del racionalismo moderno, los dilemas de la relación entre la mente y el cuerpo, y las doctrinas de las emociones a las que aún se remiten las teorías psicoanalíticas contemporáneas.