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Mi suicidio

Mi suicidio

Trama
  • Año de edición 2014
COP $ 65.000
COP $ 49.000 25% de descuento

-Mi suicidio- es un texto de despedida de una sinceridad profunda. Henri Roorda desgrana las preguntas esenciales de la vida, el amor, la sociedad, el trabajo y el placer, mientras prepara su fin. No era un ser enfermo, desesperado o embargado por una pasión insana. Había sido un dandy, degustador de los alimentos -terrestres-, un hombre sensual que gozaba con los placeres mundanos. Esta obra vitalista, sobria, concisa, tan pura como la belleza de la vida que lo ataba a su existencia, nació con el título de -El pesimismo alegre-. -Hasta tal punto estoy vivo que no siento la proximidad de la muerte-.

Fuera de stock
-Mi suicidio- es un texto de despedida de una sinceridad profunda. Henri Roorda desgrana las preguntas esenciales de la vida, el amor, la sociedad, el trabajo y el placer, mientras prepara su fin. No era un ser enfermo, desesperado o embargado por una pasión insana. Había sido un dandy, degustador de los alimentos -terrestres-, un hombre sensual que gozaba con los placeres mundanos. Esta obra vitalista, sobria, concisa, tan pura como la belleza de la vida que lo ataba a su existencia, nació con el título de -El pesimismo alegre-. -Hasta tal punto estoy vivo que no siento la proximidad de la muerte-.
  • Formato
    Impreso
  • Estado
    Nuevo
  • Isbn
    978-84-941661-4-3
  • Peso
    0.11 kg.
  • Tamaño
    12 x 20 cm.
  • Número de páginas
    56
  • Año de edición
    2014
  • Edición
    1
  • Encuadernación
    Rústica
  • Referencia
    TRM10055
  • Colección
    Largo recorrido
  • Código de barras
    9788494166143

Henri Roorda

Autor

(1870-1925), profesor de matemáticas y autor de diversos ensayos de carácter pedagógico y filosófico. Alcanzó gran prestigio en ambientes intelectuales con obras como Le Roseau pensotant, Mon internationalisme sentimental, Le débourrage des crânes est-il posible?y Le pédagogue n’aime pas les enfants. Sus escritos constituyeron un irónico compendio de la estupidez humana que, sin embargo, destilan un profundo sentido de la solidaridad. En noviembre de 1925, Henri Roorda decidió poner fin a su vida. Mi suicidio es la justificación de este acto.