Un vicario al que se le acusa de robar camisas en una tienda, pero que se niega a defenderse; un director y actor de teatro que muere en extrañas circunstancias, dando paso a un juicio por asesinato que se sale completamente del guion; un recién casado que parece matar el tiempo robando en licorerías… En el particular universo de Horace Rumpole —un irrefrenable y audaz letrado amante de la poesía, del vino peleón, de los puritos baratos y de los casos perdidos, especialista en manchas de sangre y en el arte del interrogatorio— se mezclan a partes iguales el sarcasmo, el humor y la intriga.