La forma en que Estanislao Zuleta supo articular filosofía y literatura, destacando sus alcances, cooperaciones y desacuerdos, es el tema que nos interesa abordar para resaltar de qué manera, en su particular y polémica forma de hacer filosofía, la literatura desempeñó un lugar tan fundamental que, si se deja de lado, la figura de Zuleta queda reducida a la de un intérprete de la filosofía continental. Nos interesa ir mucho más allá para justificar la existencia de una filosofía zuletiana que, gracias a su indisoluble relación con la literatura y el arte, se inscribe en el proyecto contemporáneo que de Marx y Husserl a Foucault logró oponerse al idealismo abstracto. (De la Introducción)