Este libro no comprende la Teoría del Conocimiento como una disciplina filosófica general -en el sentido en que lo son la lógica, la ética o la estética-, sino como el estudio de un problema específico desarrollado desde una determinada posición filosófica. Por un lado, hace un recorrido histórico por los tratamientos magistrales y los precedentes filosóficos y científicos de lo que hoy podemos entender como -problema del conocimiento-. Por otro, expone el hilo conductor de una concepción del conocimiento que trata de mostrarlo como resultado de legados culturales recibidos, de lenguajes, de intereses y de representaciones susceptibles de un análisis crítico.