En estas páginas, Emma cuenta cómo, desde las estrellas, fue guiada, al principio, sin darse cuenta, a través de los sueños y sincronías mágicas que el "Universo" armaba para llamar su atención.A través de un hilo conductor invisible, todo fue tomando forma, primero soñaba, los sueños le traían sensaciones y emociones que generaban algunas veces una gran angustia y ansiedad. Al comienzo le costó relacionar estos sueños con la realidad; pero, paso a paso, el sueño bajaba a la vida y lo podía confirmar, y así comprendió que le querían decir algo.En el camino aprendió que se trataba de una información ancestral, de secretos guardados, de experiencias acalladas, y le pedían a gritos que les pusiera voz, y así reordenar el rompecabezas familiar sin juicio, siempre desde la observación, para que cada pieza encuentre su lugar.El tiempo del sufrimiento ya pasó; estamos para un bien mayor.A medida que vamos tomando consciencia, nuestra vida se torna más simple, más armoniosa y más feliz.Es importante saber que más allá de lo que nos ocurre en la película de la vida, lo verdaderamente valioso es qué hacemos con lo que nos pasa.La consciencia crea la realidad según la necesidad de aprendizaje, y las lecciones se repiten si no se madura la consciencia.Ojalá la vida de todos se llene de arcoíris de brillantes colores, comprendiendo que vinimos a ser felices.