search
Subtotal USD $ 0,00
Total USD $ 0,00
  • Impreso
Obra selecta I

Obra selecta I

  • Año de edición 2024
USD $ 47,63

Antonin Artaud fue un poeta que asumió todas las dimensiones y consecuencias que implica esa palabra. Su cuerpo, su vida mental y su obra fueron lo mismo. Se unieron en el magma primordial, ardiente, peligroso, originario, de donde los antiguos seres humanos bebían sus historias, incorporaban sus mitos, hablaban con sus dioses, se curaban, decidían su destino, se hacían otros, pájaro, montaña, raíz, fruto y donde el arte no existía, sino que era simplemente la dimensión más alta, la más intensa, de lo que llamamos vida. Ahí, en ese punto, es donde Artaud construyó su cuerpo y su obra.

Antonin Artaud fue un poeta que asumió todas las dimensiones y consecuencias que implica esa palabra. Su cuerpo, su vida mental y su obra fueron lo mismo. Se unieron en el magma primordial, ardiente, peligroso, originario, de donde los antiguos seres humanos bebían sus historias, incorporaban sus mitos, hablaban con sus dioses, se curaban, decidían su destino, se hacían otros, pájaro, montaña, raíz, fruto y donde el arte no existía, sino que era simplemente la dimensión más alta, la más intensa, de lo que llamamos vida. Ahí, en ese punto, es donde Artaud construyó su cuerpo y su obra.
  • Isbn
    978-607-8895-45-8
  • Peso
    1.24 kg.
  • Tamaño
    15 x 23 cm.
  • Número de páginas
    768
  • Año de edición
    2024
  • Edición
    1
  • Encuadernación
    Rústica
  • Referencia
    SPM10119
  • Código de barras
    9786078895458
Antonin Artaud

Antonin Artaud

Autor

Nació en Marsella en 1896 y murió en París en 1948. Fue un poeta, dramaturgo y actor, cuyas teorías y trabajos influyeron en el desarrollo del teatro experimental. Fue co-fundador del Théâtre Alfred Jarry en 1927, en el que produjo varias obras, incluyendo una suya, The Cenci (1935), una ilustración de su concepto de “teatro de la crueldad”. Artaud utilizó este término para definir un nuevo teatro que debía minimizar la palabra hablada y dejarse llevar por una combinación de movimiento físico y gesto, sonidos inusuales, y eliminación de las disposiciones habituales de escenario y decorados. Con los sentidos desorientados, el espectador se vería forzado a enfrentarse al fuero interno, a su ser esencial, despojado de su civilizada coraza. Impedido siempre por enfermedades físicas y mentales crónicas, Artaud fue incapaz de poner sus teorías en práctica. Poeta maldito en toda la acepción de la palabra, Antonin Artaud ganó en cierta manera la inmortalidad con su resistencia al mundo exterior.