El trabajo interdisciplinar constituye un imperativo para el saber teológico. El carácter inagotable del misterio, la condición finita del teólogo, la complejidad de los contextos y los desarrollos actuales de la epistemología muestran la insuficiencia de una sola perspectiva disciplinar para elaborar propuestas teológicas fundadas y fecundas. Ahora bien, lo que es cierto para la teología toda cobra especial relevancia para la teología práctica, en su tarea de comprender y orientar la acción humana desde la praxis evangélica. ¿Por qué, desde cuáles horizontes, cómo y con quién llevar a cabo el trabajo interdisciplinar en teología práctica? Tales son los interrogantes abordados en el presente libro, que es fruto de las conversaciones del Grupo de Santiago, un equipo de profesores de América y Europa. El diálogo con las demás especialidades teológicas, con las ciencias sociales, con las filosofías, con los saberes de la gestión y con los saberes populares, además de la presentación de trabajos interdisciplinares en los campos sociales, universitarios y eclesiales concretos, es, por otra parte, la estructura temática de la obra que presentamos. Este texto constituye, entonces, una contribución a la renovación de los estudios teológicos, en busca de una comprensión pertinente de la vida y del mundo desde la sabiduría que brota de la revelación de Dios.