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  • Ebook
La prueba de los amigos

La prueba de los amigos

  • Año de edición 2013
COP $ 12.900

La prueba de los amigos. Félix Lope de Vega Fragmento de la obra Jornada primera (Entren Fabio, Fabricio, Tancredo, Fulgencio y otros, de acompañamiento, y Feliciano, con un luto; y detrás de todos Galindo, lacayo, con otro luto a lo gracioso.) Fabio: Téngale Dios en el cielo, que, juzgando por sus obras, mejor padre, muerto, cobras que le perdiste en el suelo; tales fueron sus costumbres, que pienso que, desde aquí, le puedes ver como allí se ven las celestes lumbres. Fulgencio: En mi vida supe yo dar un pésame, Tancredo. Tancredo: No me dio cosa más miedo, ni más vergüenza me dio. ¿Cómo diré que, en rigor, de consuelo le aproveche: "¿Vuesa merced le deseche por otro padre mejor?" Fulgencio: Eso fuera desatino; óyeme e imita luego. Tancredo: ¿En fin, vas? Fulgencio: Temblando llego. Como el gran padre divino lo es de todos inmortal, consuelo podéis tener, que os ha de favorecer, Feliciano, en tanto mal; su falta se recupera con poneros en su mano. Fabricio: No es posible Feliciano que en vos Everardo muera, quedando tan vivo en vos, que sois su traslado cierto; pero guárdeos Dios, y al muerto téngale en su gloria Dios.


La prueba de los amigos. Félix Lope de Vega Fragmento de la obra Jornada primera (Entren Fabio, Fabricio, Tancredo, Fulgencio y otros, de acompañamiento, y Feliciano, con un luto; y detrás de todos Galindo, lacayo, con otro luto a lo gracioso.) Fabio: Téngale Dios en el cielo, que, juzgando por sus obras, mejor padre, muerto, cobras que le perdiste en el suelo; tales fueron sus costumbres, que pienso que, desde aquí, le puedes ver como allí se ven las celestes lumbres. Fulgencio: En mi vida supe yo dar un pésame, Tancredo. Tancredo: No me dio cosa más miedo, ni más vergüenza me dio. ¿Cómo diré que, en rigor, de consuelo le aproveche: "¿Vuesa merced le deseche por otro padre mejor?" Fulgencio: Eso fuera desatino; óyeme e imita luego. Tancredo: ¿En fin, vas? Fulgencio: Temblando llego. Como el gran padre divino lo es de todos inmortal, consuelo podéis tener, que os ha de favorecer, Feliciano, en tanto mal; su falta se recupera con poneros en su mano. Fabricio: No es posible Feliciano que en vos Everardo muera, quedando tan vivo en vos, que sois su traslado cierto; pero guárdeos Dios, y al muerto téngale en su gloria Dios.
  • Formato
    Ebook
  • Estado
    Nuevo
  • Isbn
    9788499532493
  • Peso
    1.1 MB
  • Número de páginas
    158
  • Año de edición
    2013
  • Idioma
    Español
  • Formato
    EPUB
  • Protección
    DRM
  • Referencia
    BKW121700