search
Subtotal USD $ 0,00
Total USD $ 0,00
  • Revista
Filosofía & Co No.8. Dosier...

Filosofía & Co No.8. Dosier ¿qué queda en pie hoy del pensamiento de Kant? La actualidad del filósofo 300 años después

  • Año de edición 2024
USD $ 16,85

«Obra como si la máxima de tu acción fuese a convertirse por tu voluntad en una ley universal de la naturaleza» Immanuel Kant, Fundamentación de la metafísica de las costumbres La pregunta la lanzó una persona durante una cena con bastante gente: ¿qué cosa incorrecta que nunca te hayas atrevido a hacer harías si supieras con toda seguridad que nadie te castigaría por ello? A partir de ahí, empezaron a surgir respuestas más serias de lo que en un principio parecía que serían. Respuestas que en algún caso incluso podrían llegar a tambalear la consideración moral de alguno. Y a continuación vino un interesante debate sobre qué pasaría si nadie nos viera, cómo actuaríamos si no se nos impusieran normas desde fuera, si no temiéramos a las consecuencias. ¿Podríamos mantener en todas estas circunstancias algo así como una autoley moral intachable que provoque acciones buenas en sí mismas? El imperativo categórico con el que empieza este texto -que nuestras acciones individuales sean tales que puedan convertirse en modelo para todos- vertebra toda la ética de Immanuel Kant. ¿Es esto sostenible? ¿Es esto, simplemente, posible? ¿Lo era entonces, en la época del filósofo prusiano? ¿Lo es ahora, trescientos años después de su nacimiento? ¿Es el ser humano-cada una de nosotras, cada uno de nosotros-- capaz de actuar siempre rigiéndose por una moral sin reservas, sin mácula? Kant apuesta por una ética incondicional, la de que siempre debemos perseguir el bien, aunque no obtengamos ningún premio, ninguna recompensa a cambio. El filósofo distingue dos tipos de ética: una autónoma, por la que uno mismo se concede el fundamento moral de sus propios actos; y una ética heterónoma, que, al contrario, es la que se basa en criterios externos, ajenos, decididos por otros. Él defiende la primera, la autónoma, y dice, además, que la ética debe ser universal: crear un marco bajo el que puedan juzgarse todas las acciones humanas.

«Obra como si la máxima de tu acción fuese a convertirse por tu voluntad en una ley universal de la naturaleza» Immanuel Kant, Fundamentación de la metafísica de las costumbres La pregunta la lanzó una persona durante una cena con bastante gente: ¿qué cosa incorrecta que nunca te hayas atrevido a hacer harías si supieras con toda seguridad que nadie te castigaría por ello? A partir de ahí, empezaron a surgir respuestas más serias de lo que en un principio parecía que serían. Respuestas que en algún caso incluso podrían llegar a tambalear la consideración moral de alguno. Y a continuación vino un interesante debate sobre qué pasaría si nadie nos viera, cómo actuaríamos si no se nos impusieran normas desde fuera, si no temiéramos a las consecuencias. ¿Podríamos mantener en todas estas circunstancias algo así como una autoley moral intachable que provoque acciones buenas en sí mismas? El imperativo categórico con el que empieza este texto -que nuestras acciones individuales sean tales que puedan convertirse en modelo para todos- vertebra toda la ética de Immanuel Kant. ¿Es esto sostenible? ¿Es esto, simplemente, posible? ¿Lo era entonces, en la época del filósofo prusiano? ¿Lo es ahora, trescientos años después de su nacimiento? ¿Es el ser humano-cada una de nosotras, cada uno de nosotros-- capaz de actuar siempre rigiéndose por una moral sin reservas, sin mácula? Kant apuesta por una ética incondicional, la de que siempre debemos perseguir el bien, aunque no obtengamos ningún premio, ninguna recompensa a cambio. El filósofo distingue dos tipos de ética: una autónoma, por la que uno mismo se concede el fundamento moral de sus propios actos; y una ética heterónoma, que, al contrario, es la que se basa en criterios externos, ajenos, decididos por otros. Él defiende la primera, la autónoma, y dice, además, que la ética debe ser universal: crear un marco bajo el que puedan juzgarse todas las acciones humanas.
  • Peso
    0.30 kg.
  • Tamaño
    20 x 27 cm.
  • Issn
    978-84-10086-04-3
  • Número de páginas
    96
  • Año de edición
    2024
  • Edición
    1
  • Encuadernación
    Rústica
  • Referencia
    TGT10020
  • Colección
  • Código de barras
    9788410086043

ACTUALIDAD
Noticias

REPORTAJE
¿Se ha degenerado el espacio público?
Por Gonzalo Velasco Arias

EN MI OPINIÓN
Por una práctica estética y disensual de la filosofía
Por Rodolfo Wenger

BIOGRAFÍA&PENSAMIENTO
Ingeborg Bachmann
Por Pol Ribas Domènech

FILOSOFÍA&VIDA
El perfeccionamiento, ¿una forma de cuidado o una agresión?
Por Mª Ángeles Quesada

ENTREVISTAS
Michel Onfray
Por Mercedes López Mateo

EN MI OPINIÓN
Memes, simulacro y nihilismo
Por Clara Ramas San Miguel

CORRIENTES FILOSÓFICAS
Los feminismos dentro del feminismo
Por Javier Correa Román

DEBATE FILOSÓFICO
¿Es el ser humano superior al resto de animales?
Por Javier Correa Román

EN DIÁLOGO
Ortega y Unamuno: ¿qué significa el progreso?
Por Irene Gómez Olano

PENSAR EL MUNDO DESDE… PUERTO RICO
La descolonización y la decolonialidad
Por Rocío Zambrana

FILOSOFÍA HOY
¿Huir de las ciudades amplía nuestra libertad?
Por Miguel Antón Moreno

DOSIER
¿Qué queda en pie hoy del pensamiento de Kant?
Por Laura Herrero Olivera

EN MI OPINIÓN
Académicos y filósofos
Por Luciana Martínez

CAJA DE HERRAMIENTAS
4 pensadoras reflexionan sobre la enfermedad
Por Melina Alexia Varnavoglou

CONVERSACIONES FILOSÓFICAS
Laura Quintana y Damián Pachón: filosofía, diálogo y emancipación
Por Amalia Mosquera

VOCES OLVIDADAS
Lucille Clifton
Por Cristina Arufe Moares

LIBROS
Novedades editoriales y lecturas recomendadas

SILENCIO, SE PIENSA
Futuros posibles: entre la distopía y la salvación
Por Julieta Lomelí

TÚ OPINAS
Pensando en voz alta

FILOSOFÍA&CIENCIA
¿Por qué la química es un problema filosófico?
Por Irene Gómez Olano

FILOSOFÍA&LITERATURA
Salvar a las mujeres de la locura
Por Cristina Arufe Moares

FILOSOFÍA&CINE
¿No nos gustan los ricos o aspiramos a serlo?
Por Alba Lafarga

FILOSOFÍA&ARTE
La crisis del arte en la era digital
Por Javier Correa Román y Julia Isasti

CUESTIONARIO DE PROUST
Margarita Rosa de Francisco

EN MI OPINIÓN
La libertad inútil
Por Rebeca Baceiredo