Hay algunos osteópatas que aun no lo entendieron… Andrew Taylor Still abrió la Puerta a la mística y a la espiritualidad en el Arte mecánico de curar. En sus obras son múltiples las referencias al espíritu, el alma, el infinito, el árbol de la vida, la eternidad, la mente y otros conceptos empapados por lo sutil. Herbert Hoffman vio la brillante luz bañando el marco de esa Puerta y decidió empujarla un poquito más. ¡Queremos ver la realidad más claramente! Ahí mismo (1908) comenzó a escribir Osteopatía Esotérica, el primer ladrillo que construye el largo puente entre nuestra disciplina y la orientalidad. En este "pequeño libro" se nos introduce en uno de los conceptos madre del arte de lo sutil: "El órgano tiene una MENTE". Podemos hablar con esa mente y comenzar a ver resultados que no estábamos teniendo hasta ahora. Con prólogo y notas del Osteópata argentino Alan Bergues, en este libro se nos da el primer paso de una larga carrera de una Osteopatía moderna tendiente un poco más a lo espiritual, más como era… y como nunca debió dejar de ser.