El objetivo de la obra no es comparar contenidos cognoscitivos entre las explicaciones de ciertos fenómenos que tratan de dar niños y adolescentes y las concepciones o teorías que se sostuvieron en algunos períodos de la historia. Si bien tales comparaciones son posibles, el que un niño de ocho años describa de la misma manera que lo hacía Aristóteles la trayectoria de un proyectil, no significa que Aristóteles tuviera la misma -edad operativa- que un niño de ocho años. Una vez se verifican dichas coincidencias, comienza el análisis epistemológico para establecer por qué razón un genio determinado no pudo superar ciertas barreras en su intento de explicar fenómenos naturales.