Transcurre el año 1910. El campamento de gitanos del rey Percival Abadie levanta sus carpas en un descampado aledaño a la ciudad de San Sebastián. Kavi Stepjich, un joven y arrogante artista callejero de gran talento para el cante y la guitarra, fija su atención en Yelena, la hija de su rey. El deseo, las circunstancias, las traiciones, los celos y las ambiciones entretejen el devenir de los protagonistas, que constantemente se percatan y resaltan las diferencias entre el mundo de los romá y el de los gadjé. A lo largo de la trama, los eventos se entrelazan para inmiscuir al lector en la cultura nómade, mientras que se toman en cuenta sucesos documentados en la época. Así, la narrativa de León Barrientos logra categorizarse como romántica e histórica. Con una prosa veloz y expectante, El acorde de la princesa gitana presenta la historia de un amor recíproco, pero imposible, enmarcado en la cosmovisión de la cultura gitana de la España de principios del s. XX.