En el corazón de Menorca, dos hombres descubren el amor; un amor que desafía las convenciones y todas sus expectativas.   Bruno Mascaró lleva una apacible vida en Menorca, su lugar de origen, junto a su mujer, Natalia, y su hija Emma. A finales de mayo de 2002, madre e hija viajan a la península por motivos familiares y durante aquella semana Bruno conocerá a Theo, un joven escritor americano con antiguas raíces menorquinas. La conexión que surgirá entre los dos irá más allá de una simple amistad. Ambos experimentarán un torbellino de sentimientos para el que no estaban preparados. El deseo, la pasión y el amor se mezclarán para vivir con urgencia una aventura que saben desde el principio que tiene los días contados. Con la belleza de Menorca como telón de fondo, sus playas vírgenes, sus pueblos y, por supuesto, sus faros, Bruno y Theo exprimirán cada minuto juntos. Reirán, llorarán y se amarán sin ser conscientes aún que aquella semana va a cambiar el resto de sus vidas para siempre.