El presente volumen pretende acercar al lector a diversas realidades de ciudades cubanas que ostentan valores excepcionales. No están todas, pero hay una buena muestra del quehacer cotidiano por salvaguardar estas imprescindibles piezas de aprendizaje urbano y arquitectónico. La Habana ocupa un espacio protagónico, en justicia de su relevancia como ciudad capital de la isla, y al paradigmático proceso de gestión del desarrollo que muestra su extraordinario centro histórico.