Las vidas de Antonio y Carmelita se dan en un contexto de fin de ciclo del jornalerismo andaluz, a la vez que de una grave crisis de la izquierda española durante el periodo de consolidación democrática. A partir de la autobiografía del propio Antonio y de los testimonios de Carmelita, esta obra da cuenta de los cambios que se producen en este periodo en la militancia campesina, que tenían como fin las reivindicaciones por el reparto de tierras, la reforma agraria y la asunción de nuevos planteamientos basados en la defensa del medio ambiente, la ecología y el andalucismo. El testimonio de sus luchas y resistencias ilustra así el periodo histórico en que transcurren sus vidas.