Este segundo volumen de La institución. La pasividad, uno de los últimos escritos póstumos editados de Merleau Ponty, se nos ofrece como una invitación al descubrimiento, la indagación y la reflexión de experiencias complejas. Una propuesta que brinda pocas comodidades: una forma de escritura a ser completada, un pensamiento a proseguir, una sintaxis a reponer. Pero que, por esto mismo, es una invitación a una de las formas más complejas de la experiencia: la experiencia misma del pensar.